Javier, marido de Irma y padre de Inés, Salomé, Miguel y Pilar, peruanos; Paquita, esposa de Carlos; y don Julián, sacerdote, son los últimos cuyos queridos restos hemos recibido en el Columbario. Como sabéis, todos los lunes, al terminar la Misa de la tarde, invitamos a los asistentes a rezar un responso en el Columbario por los que aquí descansan y por todos los difuntos.

Las Misas de los días 1 y 2 de noviembre se ofrecerán por los fieles difuntos que hayan tenido alguna relación con la parroquia y que conozcamos, citándolos nominalmente. Asimismo, y como hacemos los lunes, al terminar la Misa de la tarde se rezará un responso en el Columbario, todos los días de noviembre, por los que allí descansan.

Hemos editado un nuevo folleto informativo que ponemos a vuestra disposición para las personas interesadas en el Columbario de nuestra parroquia. Son muchas las parroquias en España que cuentan con estos columbarios. También la nuestra ha decidido acoger las cenizas de nuestros hermanos en la fe, en un espacio de la Iglesia para así facilitar la atención espiritual que pueda prestarse a esos queridos restos. Para más información, podéis dirigiros a la parroquia o llamando al tfno 619261464 de la persona encargada de esta iniciativa, también localizable en vtesanchis@hotmail.com

Además, os podéis descargar el folleto informativo o podéis encontrar más información pinchando aquí.

Durante el mes de noviembre pondremos particular énfasis en la oración por los difuntos, teniéndoles muy presentes en las Misas que se celebrarán ese mes y en los responsos que rezaremos diariamente después de la Misa de 19:45h en nuestro Columbario.

Además, os recordamos que por visitar devotamente el Cementerio o Columbario, o únicamente orando mentalmente por los difuntos, del 1 al 8 de noviembre se puede lucrar indulgencia plenaria aplicable solamente a las almas del purgatorio. Además, los días 1 y 2 se puede lucrar indulgencia plenaria en todas las iglesias y oratorios.

La instrucción de la Congregación para la Doctrina de la Fe, sobre la sepultura de los difuntos y la conservación de las cenizas en caso de cremación, fue presentada el pasado martes en la sala de prensa de la Santa Sede, con el título Ad resurgendum cum Christo. En la instrucción recuerda la postura que ha tenido siempre la Iglesia, recomendando que los cuerpos de los difuntos, o en caso de incineración las cenizas, sean conservadas en un cementerio o lugar sagrado.